Los pequeños momentos compartidos con los niños son importantes
La calidad de tiempo durante la niñez es vital para el crecimiento y desarrollo de los niños. La calidad de tiempo entre padres e hijos desarrolla una comunicación más sólida, promueve interacciones, fortalece los lazos dentro de la familia, ayuda a los niños a ser más saludables mental y emocionalmente, desarrolla la autoestima e inculca valores y experiencias en sus hijos para ayudarlos a convertirse en mejores personas en general. Los beneficios para los padres incluyen la comunicación entre los padres, el acercamiento y el aprendizaje de sus hijos, y el aprendizaje de diferentes actividades que brindan diversión y gozo a todos los miembros de la familia.
Lo que más me gusta de la calidad del tiempo en familia: no requiere esfuerzo. Puede ser planificado o no planificado; ocurrir en casa, como un paseo en auto o en el patio de su casa; y puede suceder por la mañana, al mediodía y por la noche. La creatividad que rodea la calidad del tiempo no tiene tiempo ni limites, lo que significa que no es necesario que dos momentos tengan que ser iguales (a menos que a usted quiera que lo sean). A continuación, encontrará algunos consejos para crear más calidad con el tiempo que comparte con su familia.
Dígales a sus hijos que los ama, a menudo. Sus hijos necesitan saber que se siente por ellos. Expresar su amor les recuerda que son valorados. Para los niños mayores, esto también se puede hacer de una manera chistosa. Puede “competir” con su hijo diciendo que uno ama más al otro; tratando de medir la cantidad de amor que se tienen el uno al otro; o comparar su amor por ellos con el amor por otra cosa (“Te amo más de lo que amas tu comida favorita”).
Cree rutinas para diferentes ocasiones. Crear una rutina para la mañana o la noche no tiene por qué ser complicado. Solo necesitan ser especiales. Tómese un tiempo para cepillarse los dientes juntos antes de comenzar o terminar su día. Acueste a sus hijos como lo haría normalmente, añadiendo una frase antes de cerrar la puerta. Le digo a mi hijo: “Buenas noches, te quiero. Te veré por la mañana. Buenas noches, te amo”, en el mismo orden y todas las noches. De manera similar, tener frases cuando vamos a la escuela, regresamos a casa y antes de comenzar los viajes en automóvil.
Ríase y sea gracioso, incluso en los momentos más pequeños. Sea chistoso en el auto, contar chistes, reír en momentos aleatorios y vestirse con ropa divertida son pequeñas cosas que le hacen sonreír y reír, lo que mejora su salud emocional y la de sus hijos. Esto es especialmente útil si tuvo un mal día y sirve para mostrarles a sus hijos que puede ser tan graciosos como ellos.
Dedique tiempo a las pequeñas cosas. La calidad del tiempo compartido no debe ser programado ni costoso para disfrutar de la compañía del otro. Puede hacer un campamento en la sala de estar, hacer un picnic en el automóvil o simplemente dar un paseo hasta su área comunitaria favorita, como un jardín o una biblioteca. A medida que los niños crecen, puede dejar que los niños elijan la ruta que conduce o caminan, dejar que elijan qué comer para la cena o incluso decidir cómo les gustaría pasar el tiempo con usted.
Publicado por Chelsey Byers
02 de julio de 2020